Pedro Soler «Las escenas que pinto me remueven interiormente»

La Verdad, 27 de Mayo de 2016

En su pintura es constante la presencia de la figura humana en poses muy variadas. Igual muestra a la mujer dormida que parece levitar en el espacio, que el abrazo entrañable de jóvenes que acaban de encontrarse. Y, aunque también se exponen cuadros que presentan a niños cargados de ternura en su desnudez, es innegable el predominio de la imagen femenina con su razón de ser. Escribimos sobre Perla Fuertes y su exposición en las salas del Museo Arqueológico Los Baños, de Alhama de Murcia. Ella confiesa que, al enfrentarse a un lienzo, solo trata de «de transmitir mis sensaciones o emociones a través de la obra. Y la figura humana me sirve como medio para seguir ese camino». Pero, ¿por qué ese empeño femenino? «El predominio de la imagen femenina quizá se deba a que busco en ella una mimetización de sensaciones interiores que en la figura masculina no podría encontrar tan fácilmente. Es el predominio de una mente femenina lo que trato de plasmar».

Las exposiciones de Perla Fuertes también van enhebradas a unos títulos que incitan a pensar, o que impulsan a que el espectador se anime a buscar en las obras una directa causa. La actual se presenta como ‘Fragmentos y evocaciones’, título que la pintora justifica porque «la gran mayoría de los cuadros expuestos se componen de fragmentos, es decir, de momentos congelados, de ideas capturadas, retenidas, recuerdos impresos en un momento dado. Le puse este título porque pensé que era el que mejor definía la obra de una manera escueta».

Pese a lo escrito sobre la figura humana, puede contemplarse un cuadro -‘La búsqueda’- en el que el paisaje se hace presente con la visión del río Segura a su paso por la capital. ¿Es una excepción o la apertura a novedosas ansias pictóricas? Perla responde que «cada obra surge por una idea concreta. Si esa idea no está pensada para incorporar un paisaje, añadirlo forzadamente, a mi parecer, entorpecería lo plasmado; por lo tanto, no me lo planteo o, directamente, lo excluyo. Pero, centrándome en su pregunta, realicé este cuadro para una exposición colectiva titulada ‘Pintar Murcia’, en la que el planteamiento inicial era recoger solamente un paisaje. Para mí faltaba una imagen complementaria. Sin la imagen de mujer, que contempla con tanta serenidad el curso del río, esa escena del paisaje exclusivo no tendría ningún sentido. Por esto pinté el cuadro, según mi parecer».

 

Hay gestos en cada una de las figuras que parecen proporcionarles sentimientos muy íntimos. ¿Es así o son modos de variar el acabado de los rostros, de los ojos, de las manos…? «Las personas que me conocen -afirma la pintora- saben que soy una persona sensible y, quizás por esto, presto más atención a los gestos y les doy mucha importancia. No pretendo plasmar gestos sin buscar un porqué, pues entonces la obra carecería de lo más importante, que para mí son los sentimientos. Sería una obra vacía, sin interior».

Dos de las obras, ‘Respirar’ y ‘Camino de incertidumbre’, parecen romper con la serenidad que prima en el conjunto, aunque, según afirma la autora, «no se trata de pintar otra cosa, algo distinto. No es ese el sentido que me mueve a plantearme un nuevo tema. Como he comentado anteriormente, las escenas que pinto me tienen que remover interiormente, de modo que en el fondo consiga plasmar lo que busco, aunque reconozco que hay veces que me cuesta buscar un entorno a esa idea. En estas imágenes que cita, en las que aparecen chicas sumergidas, no eran la serenidad y la quietud sosegada lo que quería reflejar. Son imágenes que para mí evidencian una cierta angustia, inquietud, incertidumbre, y no demuestran disfrutar placenteramente de ese fondo marino en el que aparecen». Pese a todo, también reconoce que «en los momentos en que todo fluye a la hora de pintar, si además se acompaña de música clásica -con ‘tempo andante’-, pueden pasar las horas y parecer que solo han pasado unos minutos. En ocasiones, también sucede que comienzo a trabajar con un cuadro y no consigo entablar una conversación con él. Si en algunos momentos me desespero ante un cuadro, prefiero apartarlo y continuar otro día con él».

Su estilo

Ligada desde siempre a un estilo de profundo corte realista, Perla Fuertes reconoce que «el realismo es el estilo en el que mejor me siento realizada, aunque también, en ocasiones, he hecho alguna incursión con la idea de experimentar en otros ámbitos. Finalmente, vuelvo a acogerme al realismo que, de momento, es lo que más me atrae». Aunque sometida, sobre todo, a su propia iniciativa, acepta que «a veces, los comentarios de las personas de cualquier condición que se acercan a ver la exposición pueden añadir o complementar ideas, que me sirven para plantearme nuevos enfoques. Para mí, eso tiene un punto muy especial: que los comentarios, muchos de ellos constructivos, me ayuden a mejorar».

la verdad 16-05-27